Hoy, 19 de septiembre es una fecha importante
dentro de nuestro mundo musical venezolano…, en una fecha como esa del año
1946, nacía en Alemania alguien que desde esa tierra lejana vino a nuestro país
a crecer y dejarnos un legado imperecedero: el maestro VYTAS BRENNER. En esta nota no quiero centrarme en una reseña
biográfica de este genio musical ya que en la web conseguimos muchas y con
información bastante acertada. Preferiría hablar un poco de lo que ha
significado la obra de VYTAS BRENNER
para mí y el impacto que creo ha causado dentro de nuestra música,
especialmente en el campo del rock. Mi primer contacto con la música de Vytas Brenner se produce en la época de
su máximo esplendor, fue aproximadamente en 1977, cuando mi hermano llevó a
casa un disco que aún lo oigo con la misma emoción de la primera vez: Jayeche
(1975), un disco que para su momento ya tenía dos años de haber sido editado y
para mí era algo totalmente nuevo. Me estaba iniciando en eso de la música rock
y lógicamente me había concentrado en artistas de habla inglesa (Beatles, Stones, Who, estaba
descubriendo a Emerson, Lake &
Palmer, Yes, Deep Purple y cosas menos populares
como Angel y su Helluva Band y Budgie con In For To Kill). De
bandas venezolanas, apenas conocía Los
Darts y Los 007. Ya con 15 años,
puedo decir que era un ignorante musical. Cuando escuché las primeras notas de Cariaco, algo me dejó atónito y a medida
que avanzaba el disco, la sensación era mayor. No sabía nada de ese músico y su
nombre lógicamente me parecía al de alguien de tierras lejanas, pero al
escuchar algunos temas y ver los títulos de las canciones, noté que había algo
de nuestra tierra en esa música.
Ese disco me abrió las puertas a una nueva
dimensión, era algo totalmente nuevo para mí, una nueva propuesta musical y
decidí ver si conseguía más música de ese artista llamado VYTAS BRENNER y su Ofrenda.
En una época donde no había tantos medios de difusión como los actuales,
viviendo en una ciudad de nuestros llanos occidentales como Acarigua, la tarea
no era nada fácil, pero sentí que tampoco era imposible y para esas fechas, un
amigo viajaba a Barquisimeto y le pedí me consiguiera algo de ese genio. A su
regreso venía con el casette de La Ofrenda de Vytas (1973), disco
que aún hoy en día sigue sonando tan innovador como en su año de edición. Con
el paso de los años fui escuchando las diferentes grabaciones de VYTAS BRENNER y debo decir que su obra
no sólo fue innovador, es algo inigualable. Muchos me han criticado porque
dentro del contexto de www.rockhechovenezuela.com y en conversaciones con amantes de la historia de este género musical
en nuestro país, muy pocas veces hablo de rock venezolano y prefiero utilizar
el término de rock hecho en Venezuela y la razón es muy sencilla, pienso que
hablar de rock venezolano significaría que ese género musical tenga matices de
lo nuestro, del folklore de nuestra patria y no puedo hablar de rock venezolano
al referirme a bandas como Los Darts, Los
007, Arkangel, Zapato 3... agrupaciones que respeto,
disfruto y oigo con frecuencia, por mencionar algunos; pero cuya propuesta
musical aún cuando pueda ofrecer originalidad musical, esa personalidad se
enmarca dentro del movimiento rock en el cual se desarrollaron y no en la
combinación con parte de nuestra música.
VYTAS BRENNER logró lo que para muchos era
imposible: combinar nuestra arpa, cuatro y maracas con la instrumentación y
sonido de las tendencias de rock imperantes en ese momento y en su primer disco
en esta etapa musical (La Ofrenda de Vytas), podíamos
escuchar su talento como tecladista, a un gran guitarrista como Pablo
Manavello, el bajo de Carlos Acosta o la batería de Frank Rojas, pero a la vez
el arpa de Ramón Hernández o el cuatro de Ángel Melo. Era un disco de rock con
lo venezolano hasta en los tuétanos ya que no sólo era la música, la
instrumentación; los títulos de las canciones son nuestros, son propios de
nuestra cultura y leemos nombres como el de una de sus piezas más conocidas, Frailejón, que representa esa especie
botánica que abunda en los páramos venezolanos, Araguaney, el nombre de nuestro árbol nacional, Canto del pilón, una de nuestras
tradiciones, Tragavenado, Tormenta de Barlovento... y si los
nombres nos identifican como venezolanos, la portada del disco también está
impregnada de nuestro gentilicio y vemos imágenes que nos llevan a una
tradición que hace poco fue declarada Patrimonio Cultural de la Humanidad: los
Diablos Danzantes de Yare. Ese disco considero que es una verdadera expresión
de lo que podríamos llamar con certeza, rock venezolano. Como todo artista, VYTAS BRENNER desarrolló una obra que
tiene puntos esenciales y su mayor innovación se encuentra entre 1973 y 1977: La
Ofrenda de Vytas (1973), Hermanos (1974), Jayeche
(1975) y Ofrenda En Vivo (1977). En este último disco, Vytas también fue
innovador y presentó la primera grabación completamente en vivo dentro del rock
hecho en Venezuela y el primer álbum doble dentro de este género musical en el
país. Además, también representa el resultado de uno de los pocos artistas que
hizo giras haciéndose respetar como músico, donde exigía un sonido impecable,
se entregaba al público de manera completa y sus interpretaciones iban
matizadas con dosis de improvisación. Aún nos ofrecería en la década de los 70,
otro álbum que es imprescindible: Ofrenda (1978).
La década de los ochenta
trajo cambios y experimentó con la música disco, con baladas pop, pero en cada
disco nos dejaba pinceladas de lo que había sido su máximo aporte a nuestra
cultura musical. Para la década de los 90 nos regala una obra que fácilmente
puede enmarcar en lo que en ese momento se etiquetó como world music, el
maravilloso Amazonia (1993). Pero como les dije, no voy a hacer una reseña
biográfica del maestro Vytas, hay
muchas en la red y quise escribir en su fecha de nacimiento ya que tenemos la
costumbre de escribir y homenajear en fechas de defunción y siempre he pensado
que es mejor tener presente la fecha de llegada y no la de partida,
especialmente cuando se trata de personajes que llegaron para nunca irse, ya
que su legado les da el titulo de inmortales. Una cosa bien interesante y
valiosa es el reconocimiento que se da a quienes dejan huella y VYTAS BRENNER, al igual que muchos de
nuestros artistas, han recibido el mejor de los reconocimientos: ha
inmortalizado lo que podemos llamar (sin connotaciones políticas), el pueblo,
la gente, su público. Son sus admiradores y seguidores quienes han llevado,
a través de la red de internautas, su
biografía, su música, sus imágenes a diferentes partes del mundo y cuando los
encargados de velar por la vigencia de nuestras manifestaciones culturales y
los artistas innovadores no lo hacen, somos nosotros quienes debemos hacerlo.
Creo que músicos como VYTAS BRENNER deberían
ser declarados patrimonio cultural del país, encargarse de darle el
reconocimiento merecido y garantizar que las generaciones venideras conozcan el
gran aporte que hizo a nuestra música... pero sí pilares como Aldemaro Romero, Simón Díaz y otros han quedado al margen, no podemos esperar algo
diferente para VYTAS BRENNER. Sin
embargo, ante el silencio de las instituciones, la voz de nosotros se encargará
de darle el puesto que merece. Recuerdo que cuando di los primeros pasos en la
creación de lo que hoy es www.rockhechovenezuela.com, por allá por el año 2002, la primera “subida” de artistas de nuestro
Rock hecho en Venezuela, incluía al creador de lo que podemos llamar Rock
venezolano. Gracias VYTAS, en una
fecha como hoy celebramos tu llegada y nunca escribiremos en la fecha de tu
partida, porque aquí estás, tan vigente como siempre.
Williams León
Imágenes de archivo de El Nacional
Imágenes de archivo de El Nacional
Un excelente artñiculo que ofrece un merecido homenaje cargado de buenos recuerdos, admiación y dándole el puesto que se merece Vytas Brenner en nuestra historia rockera.
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