En los últimos tiempos he leído, refiriéndose a las interpretaciones de algunas bandas de nuestro rock venezolano, el término de rock de oposición y básicamente se refieren al contenido lírico de algunas piezas que buscan expresar el descontento y malestar por la situación actual. Musicalmente son bandas o solistas que se ubican en diferentes categorías: agrupaciones de hard rock, heavy metal, pop-rock, trash metal, rock progresivo; son artistas que pueden ubicarse en diferentes géneros pero que tienen en la música un medio de expresión y lo hacen a través de sus letras.
Esto me llevó a recordar cuando
comencé a “instruirme” en lo que a música rock se refiere y no estoy hablando
de hace 5-10 años, estoy hablando de hace ya unas cuatro décadas; cuando no
existía internet, no había televisora por cable y mucho menos, pensar en redes
sociales. Los medios disponibles para enterarse de algunas cosas que pasaban en
el mundo musical eran la radio, escasos programas televisivos, el intercambio
de discos y casettes con los panas y, muy especialmente, algunos medios
escritos como revistas que llegaban con un año de retraso; las más importantes
de la época eran la argentina PELO y las españolas POPULAR 1 y VIBRACIONES.
Mi
deseo de conocer era tal que el dinero que me daban para el pasaje y la
respectiva merienda que consumía en los dos turnos diarios del liceo quedaba
siempre en mi bolsillo para ir “reuniendo” y poder comprar algún LP (Bs. 25 de
los viejos) o las preciadas revistas (Bs. 5 de los viejos). Lógicamente, me iba
y regresaba caminando al liceo y acostumbré a mi estómago a que debía ser
disciplinado y recibir su alimento en las horas de comida, nada a media mañana
o media tarde …, costumbre que he reiniciado y no precisamente por ahorrar para
comprar algún disco o revista. Pero, ¿qué tiene que ver todo este cuento con el
inicio de este escrito, el llamado rock de oposición? La razón es
porque en una de las tantas revistas que compré leí de un movimiento musical denominado
Rock En Oposición (Rock In Opossition, R.I.O.) y liderizado por la agrupación
británica HENRY COW, pero cuya esencia no tenía nada que ver con contenidos
líricos ya que las piezas eran mayormente instrumentales. Se trataba de
artistas involucrados en las corrientes de rock progresivo, jazz fusión, música
experimental y donde la improvisación jugaba un papel fundamental en sus obras
musicales. La primera vez que escuché un grupo de esta corriente lo vi como un
“free-rock” por establecer analogía con el llamado free jazz.
Lógicamente, la música
que desarrollaban estaba alejada de cualquier patrón comercial y las compañías
disqueras se negaban a darles el apoyo necesario para difundirla. Además de
HENRY COW, agrupaciones como los suecos SAMLA MAMMAS MANNA, los belgas de AKSAK
MABOUL, los franceses de ETRON FOU
LELOUBLAN o los belgas de UNIVERS ZERO, entre otros, formaban parte de lo que
se llamó Rock En Oposición. En ese momento, Rock En Oposición era reflejo de
crear e interpretar la música que querían y oponerse a dar concesiones a la
comercialidad y con ello satisfacer los intereses de las casas disqueras.
Hoy en día, debido a la fuerte
conflictividad política que existe en el país, algunos artistas han usado las
letras de las canciones como medio para expresar su descontento con la
situación actual y al escuchar su mensaje inmediatamente se dice: esta banda o
solista es opositora. Sin embargo, esto no es nada nuevo y precisamente uno de
los ingredientes del rock era una postura de rebeldía que se manifestaba a
través de fuertes ritmos o de letras que denunciaban todo aquello que generaba
inconformidad. Podemos recordar a JOHN LENNON con piezas como Happy Xmas (The war is over), JIMI
HENDRIX y su mensaje anti bélico en Machine
gun o U2 con Sunday bloody Sunday.
Hoy escuchamos piezas de data
reciente como Aplauden como focas de
la banda VITAL REAL
No más colas de la legendaria
agrupación GRAND BITE
el polémico Art. 350 de METÁSTASIS,
NEBLINA con su Ciudad perdida y ATIKO
con Acorralados
o COALICIÓN y su tema Penumbras (Rojo Oscurantismo)
Bandas de diferentes géneros musicales pero con un ingrediente común: se canta a una realidad que está allí presente, a lo que se ha vuelto cotidiano y que no debemos aceptar que se transforme en un modus vivendi.
Esto no es nuevo, en la década de
los ochenta, la emblemática agrupación ARKANGEL nos dejó temas como Desempleado o Gusanos del poder
o en la década de los noventa, YAGUAR cantaba Vuelve Bolívar mostrando el deseo de la llegada de alguien que tomara las riendas y pensara en
trabajar por el país, el pueblo y no trabajar para enriquecerse robando y sembrando
miseria, hambre e inseguridad. En su canto, YAGUAR dice:
“Vuelve Bolívar, vuelve ya
La patria a la deriva está
El pueblo entero quiere que la
liberes otra vez”.
No podemos dejar por fuera a un
ícono de la cultura pop como lo es YORDANO (Giordano Di Marzo) con su tema Manifiesto.
¿Rock de oposición? No creo, ya que simplemente son sólo posturas en donde todo artista ejerce su derecho a expresar, denunciar, mostrar su inconformidad ante las situaciones que hacen del día a día una lucha interminable donde sabemos cuándo salimos pero no sabemos si regresamos, una lucha donde se pierde peso por falta de alimento, una lucha donde una simple enfermedad puede ser algo mortal. Si hablamos de Rock de oposición, el típico Yin-Yang también nos llevaría a hablar de rock de oficialismo o rock gubernamental y eso iría en contra de cualquier filosofía de rebeldía al ver gobernantes viajando, llegando flacos al poder y saliendo obesos, tener ropa costosa, divisas; mientras que el pueblo va rasgando un día para llegar al otro… bueno, en realidad si se cumple el Yin-Yang en nuestro país, con el conocido Frente de Bandas Rebeldes... pero eso es otra historia.
Williams León
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